LA BROMA DEL INTERMEDIO

La broma emitida recientemente en el programa “El Intermedio” en la que una supuesta becaria era vilipendiada por el Gran Wyoming para que otros medios de comunicación criticaran la actitud déspota del presentador de la Sexta ha abierto otra vez el debate de la ética periodística.

 

La broma en sí, no deja de ser graciosa, pero pensándolo despacio hay que ver como ha evolucionado la televisión gracias al surgimiento de nuevas cadenas y a la fragmentación de la audiencia. Hemos pasado de una plaga de telebasura protagonizada por enfrentamientos entre pseudo famosillos, a otra guerra de barro entre profesionales de distintas cadenas que intentan hundirse unos a otros en función del éxito que cosechan sus respectivos programas y de su ideología.

 

Estas críticas de determinada televisión en el propio medio son muy enriquecedoras para la democracia ya que la opinión pública tiene opción de identificarse con una u otra actitud y no está sumisa a un único discurso. Pero también peligrosas, es obvio que esta guerra de medios llevada a su máximo exponente puede hacer que las cadenas se preocupen más por desprestigiar a la competencia o radicalizar la opinión de sus respectivos adeptos que de cumplir sus misiones más básicas, informar, objetivamente, y entretener, limpiamente.

Nota : Imagen tomada de la Web de Formula TV